Por: Psic. Diana Sosa, miembro del Claustro Docente de la WBC University.
Ya entró en vigor al cien por ciento en nuevo etiquetado. Sin duda es una gran herramienta para poder conocer la calidad de los alimentos que compramos y que ingerimos, sin embargo, existen muchas dudas e inquietudes al respecto.
Lo más importante que debemos tener en cuenta, es que los sellos marcan algún criterio que es dañino para la salud, ya sea exceso de calorías, azúcares, sodio, grasas saturadas, grasas trans, edulcolorantes y cafeína (éstos dos últimos ingredientes contraindicados para niños).
Lo bueno de este etiquetado es que se encuentra en la parte frontal y es fácil de entender. Además, en los productos más pequeños, se marcan con un solo sello, pero marcados con el número de ingredientes dañinos que se contiene.
La clave aquí es que uno debe elegir el producto que tenga el MENOR número de sellos (y en productos pequeños, elegir aquel que tenga el número más bajo).
Lo ideal sería que se consuman productos que NO contengan sellos, pero en ocasiones eso va a ser complicado, así que la sugerencia es que se comparan dos productos del mismo estilo, por ejemplo dos mayonesas, y se escoja aquella que tenga el menor número de sellos.
Aquí la cuestión es que a partir de que tenemos noción de que muchos de los productos que consumimos son altos en sustancias nocivas, lo mejor sería por apostar por la alimentación natural, alta en frutas, verduras, vegetales, lácteos bajos en grasas, granos, etc. Todo la anterior para poder conocer, explorar y aprender a comer de manera más saludable e inteligente, y así proveer a nuestro organismo de alimentos de alta calidad.